La pasión del cuerpo y el alma.

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Escribir con la pasión... la del cuerpo que se extasía, se retuerce, y va llenando de chispas las pieles al rozarse. Esa pasión que gasta venas y arterias, con calores sin mesura. Esa que hace manar infinidades de manjares que llenan de agua la boca, en cincuenta palabras. Esa pasión que estruja y relaja las fibras musculares que se evaporan en un fuego que arde pero no duele. Con esa pasión, con la que crecen los cuerpos, milagrosos, hasta el infinito, con la única misión de unir en la mas deliciosa fricción, las almas...
Escribir con la pasión... la del alma que espera milenios de constantes transformaciones, viendo al universo dilatarse y contraerse en una danza sin principio ni fin. Esa pasión que une humanidades por los vientres, en luces eslabonadas. Esa que cada tanto propicia explosiones de cantares y de rimas, de colores y de formas, que atraviesan tormentas solares. Con esa pasión que arranca gemidos, lágrimas y orgasmos, quiero escribir mientras la tormenta levanta tu aroma  y escucho tus pasos lejanos.

Por qué?

Porque todos, sin excepción, un día volaremos como las hojas secas en el viento y sin poder decir adiós...
Porque al momento de nacer no sabemos nada... O si? Y al momento de irnos nos vamos con una infinidad de souvenirs guardados celosamente en la pupila, la única maleta que no pesa.
Porque los te quiero, los te amo, los te odio y los besos no dados, se quedan pegados a las paredes sin alma de las calles de la vida.
Porque un sin fin de cosas que deseábamos, quedarán en el tintero,y , otras que si hicimos, en las ramas del árbol que dejamos creciendo, nos darán la despedida.
Porque los callares nos hicieron esquivos y las canciones llenaron de sol nuestros labios, y de primaveras el oído.
Porque te amé, no se como, desde cuando, ni porque, hoy que tengo casi la certeza del llanto, del amargo y del dulce, la certeza del júbilo que nace de la pureza del alma, la certeza de que la vida termina en la muerte y la muerte en la vida... Sabé que no me voy del todo...

La envidia.

Esto es un aquelarre...una locura, suspiró la vieja mientras se santiguaba apretando el rosario que le había regalado una amiga, "bendecido por su santidad" había dicho y por eso olía levemente a rosas... Que se yo? Cosas de viejas. A medida que los taconeos iban haciéndose mas fuertes, el rubor iba cubriéndole las mejillas, ademas de la indignación. Yo sabía que si me daba vuelta iba a tener que preguntar y recibir un sopapo en la nuca, así que me quedé quieta como una estatuita, imagino que me veía graciosa...
Entonces las vi, venían del lado del confesionario, todas con la cara iluminada, los ojos brillantes de dicha, como si les hubieran dado un regalo enorme, como esos que deseo para mi cumpleaños y nunca me dan... porque soy mala. Pasaban de a una, vestidas de blanco..¡Como me hubiera gustado ser una de ellas! Tenían como amor en los ojos, una luz especial. Entonces la voz del cura hizo que todos se pusieran de pie y la vieja me empujó para que yo también lo hiciera... Entonces la escucho que le dice a la de al lado: Como les van a perdonar los pecados a las putas? Encima las ponen adelante, y uno termina acordándose de que las vio en las cuatro esquinas de la plaza, levantando clientes!
Ese día aprendí que es la envidia...

... Intensa

Natura florece en mi, con envolventes y zigzagueantes movimientos, de afuera hacia dentro y viceversa... Ella que va buscando la luz, ya es la luz que va burbujeando debajo de mi piel al ritmo del deseo mas cruel, deseo ardiente del que viene en pos de mi y bulle perforando mis venas en revelaciones errantes de los días por venir.
Imagen desbordada de energía, voy incorporándote lentamente y atardezco al abandono de las blancas caricias prometidas y sin cumplir... Mirá mis ojos, dejate caer en ellos, que la fuerza viva de mis tejidos en el frescor de la flor de la madurez te reciban... Y nos mixemos en una misma piel...

AUSENCIA ( Algo diferente )

Puta ausencia, obvia ausencia, estúpida! Que no se cierre el cielo esta noche y escuche mi paridera. Que la luna retiemble y gire a la velocidad de la luz, que los mares se agiten, lavando esta inmunda ausencia llena de recuerdos brillantes como la hoja de la daga que me revuelve en la oscuridad, las entrañas y el alma.
Anda, ausencia arrastrada, que esperas para terminar tu agonía? Que cuando el olvido celoso cierre mis ojos amoratados de llanto, habrá terminado para siempre la causa de mi pesar... Por ahora solo me queda, arrancarme el corazón y arrojarlo al mar... Irracional ausencia, reina de la bajeza... Ya vas a ver... ya me vas a ver volar!