Colores de un alma que crea desde la celda de un neuropsiquiatrico. Una ninfa que inspira poemas y relatos fantásticos. Una historia que no tiene final...

martes, 16 de junio de 2015

Arrabbiata tercera:(Sin filtros, la musa no se calla)

La noche que libera a los ancestros escondidos tras las estrellas, y esa flor tibia como vómito, como la mano fláccida de pescado que tiende el hipócrita, cortando sus propios haces de evolución espontánea, mientras se le borra la sonrisa idiota y se va en un mar de mediocridad a la tumba de las palabras vacías.
Llora la simiente estéril y llora el cuenco agusanado por el mal uso de la vida. Llora el cielo perlado de luna, el manto con el que se cubre la cabeza el cobarde, dejando el culo aireándose, por las dudas de que no resulte la última receta adquirida.
La noche que juega a la lluvia, la flor mustia por su recelo hacia las rosas rojas que adornan el camino del héroe, que se quedó en su poltrona burguesa, a pudrir el tapizado, y los templos, los pactos, y los lazos que se rompen, al caminar hacia atrás, reviven la rueda histérica del ETERNAMENTE y del NUNCA MAS.
Clarissa Cristal.

miércoles, 10 de junio de 2015

...

Querías que grite, en medio de la tormenta espiralada. Que abra mis alas y te cubra de gloria la pelvis... con el manantial subterráneo de mis entrañas. Querías chocar la vida conmigo, destrozar tu monte crepitante de ternura contra mi océano susurrante. Querías derramar en mi cuenco el elixir delirante de tu alma pura... Querías que grite mientras nos caemos al cielo... Hagamos esto:Voy arrancarte la sonrisa a besos, y vas a gritar conmigo, mientras nos prendemos fuego! Y en la punta de las lenguas... un instante del infierno.
Clarissa Cristal.

Alma mía.


¿Que decirte, alma mía, cuando mi vientre florece y siento latir tu corazón,martillando fuerte desde mis pétalos suaves que te abrazan- abrasan, hasta las sienes?¿ Que versos podría recitarte en medio del temblor empantanado de somorgujos y un sismo desnudo, que canta vibratos graves y agudos, sinuosos, verdes y púrpuras, sobre el escarlata de mi vientre profundo?¿ Que maravillas he de mostrarte mientras la electricidad se enhebra en filamento, en nuestro cuerpo, único resultado de sabernos vivos, de nacer de la misma pequeña muerte?
La noche no se diferencia del día, cuando fluyen las almas que creíamos perdidas, en una cascada de batir de alas, en una canción que sabemos desde el siempre, y bailamos pegados por los sexos, sobre la nada.
C.C