En mi alma te esperan
guardadas,
ansiosas
de que te las bebas,
guardadas,
ansiosas
de que te las bebas,
cuantiosas infinitas
primaveras,
subyacentes,
eternas, despojadas,
revolotean intensas,
incendiadas,
a la espera
de tu cuerpo de quimera
que quemándome la piel
desea,
aferrarse,
clavarse a mis entrañas.
Mirame, no me niegues
el alma,
la razón
por la que aun te espero,
instantes eternos,
días que pasan,
te siento,
llegarás en silencio,
tomando mis manos
por las palmas,
llenarás
hasta el borde
mi universo.
Clarissa Cristal
primaveras,
subyacentes,
eternas, despojadas,
revolotean intensas,
incendiadas,
a la espera
de tu cuerpo de quimera
que quemándome la piel
desea,
aferrarse,
clavarse a mis entrañas.
Mirame, no me niegues
el alma,
la razón
por la que aun te espero,
instantes eternos,
días que pasan,
te siento,
llegarás en silencio,
tomando mis manos
por las palmas,
llenarás
hasta el borde
mi universo.
Clarissa Cristal